Junio 5, 2010
Si el desastre ecológico más grande en la historia del país no coloca a los Estados Unidos en el camino de la conservación energética, nada podrá hacerlo. La mancha negra en el Golfo de México es la sombra de una adicción a los hidrocarburos que se ha convertido en un estilo de vida, y como sucede con los malos hábitos, antes de lograr cambiarlos hace falta tomar conciencia. En EEUU estamos habituados a quemar energía a toda mecha porque resulta natural: el recurso está allí, es relativamente económico y hace la vida más confortable. ¿Por qué cambiar el estado de las cosas?. La respuesta no está blowing in the wind sino flotando en las aguas. Y toca mirarlas como un espejo.
No será sino hasta agosto cuando este derrame sea controlado. Eso si todo sale bien con los pozos de alivio. Para ese momento será el desastre ecológico más grande en la historia de la humanidad y tomará décadas recuperar los ecosistemas. Dejemos de lado la irresponsabilidad (y posible negligencia criminal) de BP, la incapacidad de la administración Obama para actuar y la incongruencia de una nación que pide menos gobierno hasta que enfrenta una emergencia y reclama una mayor intervención. ¿Qué nos dice esta columna de petróleo? En mi opinión algo muy claro: no podemos olvidar el origen y las consecuencias de la energía que usamos todos los días.
Ser más eficientes en el uso de la energía obliga a tomar conciencia y actuar de forma congruente. Si lograr esos cambios en el ámbito personal ya es un reto (en casa nos topamos cada día con la dificultad de aplicar todos los objetivos verdes que nos hemos propuesto) imagine lo que significan en para una corporación o un país. Pero que sea un reto no significa que sea imposible. Evolucionar nuestro sistema de vida para hacerlo más eficiente permitirá seguir disfrutando de las ventajas de la modernidad sin acabar con el planeta que nos cobija.
Una nación no puede simplemente decretar la madurez energética. El verdadero cambio debe venir de los ciudadanos, porque solo actuando de otra manera podremos obtener otros resultados. ¿Y qué mejor motivación para el cambio que una mancha negra que crece cada día? Cuando use energía en casa, lo cual sucede a cada instante, piense si la está usando de la mejor manera.
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