Los derechos humanos y ciudadanos están por encima de cualquier parcialidad política. José Sánchez (Mazuco), en la gráfica y Biagio Pilieri, fueron elegidos diputados y siguen presos por orden del Presidente
Por: Tamara Sujú Roa
José Sánchez (Mazuco) y Biagio Pilieri fueron elegidos diputados en las elecciones del 26 de septiembre. La ley dice que una vez proclamados por la respectiva Junta Regional Electoral sus procesos penales se paralizan e inmediatamente comienzan a gozar de inmunidad parlamentaria y deben ser liberados sin condicionamientos, como el de “casa por cárcel”. En ambos casos, ya hace más de una semana que fueron proclamados pero siguen ilegalmente detenidos. En el Poder Judicial deshojan la margarita sobre quien tiene la responsabilidad. Como en otros casos de perseguidos políticos donde el preso no tiene los mismos derechos que los demás, en clara aplicación de la tesis de la justicia penal paralela, caracterizada por violaciones sistemáticas de la norma que favorecen al perseguido. Lo que debe estar pasando es que no se atreven. Nadie quiere correr con la responsabilidad de cumplir con el deber ser, tal como lo hizo en su momento la jueza María Lourdes Afiuni en el caso de Eligio Cedeño, y ordenar la liberación de los diputados. Se deben estar mirando en ese espejo, porque precisamente la jueza está cumpliendo un castigo ejemplarizante, común para todos aquellos que se atreven a desafiar de una u otra forma al régimen. Para ella, la orden fueron treinta años. Entonces, ¿quién le pone el cascabel al gato? ¿Seguimos violando la Constitución y las leyes sólo por miedo a quienes las violan descaradamente? El día de mañana, cuando el estado de derecho vuelva a nuestro país, ¿dónde se van a meter y como le van a dar la cara a tanto ciudadano, a tanta familia, mujeres y niños, hogares destruidos, que arbitrariamente han sufrido cárcel y persecución? ¡No hay excusas! Los derechos humanos, los derechos ciudadanos están por encima de cualquier parcialidad política. Es a los ciudadanos a quienes se deben, para eso fueron elegidos. La Constitución da mandatos claros a la Defensora de los derechos humanos, a la Fiscal General de la República, al Tribunal Supremo de Justicia, al ministro de Interior y Justicia, a quienes tienen el deber de garantizar los derechos ciudadanos y de hacer cumplir la Constitución y las leyes de la República. Todos ellos tienen la responsabilidad de actuar para que se cumpla la norma, pero ya ninguno se atreve. Señor Presidente…están esperando su orden. p
Por: Tamara Sujú Roa
José Sánchez (Mazuco) y Biagio Pilieri fueron elegidos diputados en las elecciones del 26 de septiembre. La ley dice que una vez proclamados por la respectiva Junta Regional Electoral sus procesos penales se paralizan e inmediatamente comienzan a gozar de inmunidad parlamentaria y deben ser liberados sin condicionamientos, como el de “casa por cárcel”. En ambos casos, ya hace más de una semana que fueron proclamados pero siguen ilegalmente detenidos. En el Poder Judicial deshojan la margarita sobre quien tiene la responsabilidad. Como en otros casos de perseguidos políticos donde el preso no tiene los mismos derechos que los demás, en clara aplicación de la tesis de la justicia penal paralela, caracterizada por violaciones sistemáticas de la norma que favorecen al perseguido. Lo que debe estar pasando es que no se atreven. Nadie quiere correr con la responsabilidad de cumplir con el deber ser, tal como lo hizo en su momento la jueza María Lourdes Afiuni en el caso de Eligio Cedeño, y ordenar la liberación de los diputados. Se deben estar mirando en ese espejo, porque precisamente la jueza está cumpliendo un castigo ejemplarizante, común para todos aquellos que se atreven a desafiar de una u otra forma al régimen. Para ella, la orden fueron treinta años. Entonces, ¿quién le pone el cascabel al gato? ¿Seguimos violando la Constitución y las leyes sólo por miedo a quienes las violan descaradamente? El día de mañana, cuando el estado de derecho vuelva a nuestro país, ¿dónde se van a meter y como le van a dar la cara a tanto ciudadano, a tanta familia, mujeres y niños, hogares destruidos, que arbitrariamente han sufrido cárcel y persecución? ¡No hay excusas! Los derechos humanos, los derechos ciudadanos están por encima de cualquier parcialidad política. Es a los ciudadanos a quienes se deben, para eso fueron elegidos. La Constitución da mandatos claros a la Defensora de los derechos humanos, a la Fiscal General de la República, al Tribunal Supremo de Justicia, al ministro de Interior y Justicia, a quienes tienen el deber de garantizar los derechos ciudadanos y de hacer cumplir la Constitución y las leyes de la República. Todos ellos tienen la responsabilidad de actuar para que se cumpla la norma, pero ya ninguno se atreve. Señor Presidente…están esperando su orden. p
Fuente: La Razon.net
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