En un primer análisis, se visualizan tres resultados: el ascenso vertiginoso de más de 12 puntos, de marzo a abril, de Mockus, candidato del partido Verde; el sostenimiento casi inamovible de la posición privilegiada de Santos, abanderado del gobernante Partido de la U, y el desplome o poco “agarre” de los otros candidatos.
De acuerdo con la Encuesta de Medios, Mockus es fuerte en las zonas urbanas, donde por lo general sobrepasa o igual las preferencia del electorado con Santos; el ex ministro, por su parte, tiene consistencia en las zonas rurales. Y no sólo consistencia sino maquinaria y pegada.
Por eso, a la pregunta de quién tiene más capacidad para combatir a la guerrilla, el narcotráfico y la delincuencia, el trofeo se lo lleva y de largo Santos; pero la variable “simpatía/rechazo” también se hace una mala pasada, pues el nivel de rechazo supera el 30%.
El cruce de las líneas se produjo muy rápidamente entre marzo y abril. Los porcentajes sobre intención de votos en el tercer mes del año eran 53,8% a favor de Santos, 31.2% a favor de Mockus; treinta días depués la tortilla se voltea: 47,9% pro Mockus, 42,2% pro Santos.
Con estos porcentajes tan variables y la campaña cada vez más caliente, los encuestados y medios prefieren hablar de “empate técnico”. Los días y lo que queda de desarrollo de la campaña electoral, así como las migraciones que se produzcan hacia uno u otro una vez efectuada la primera vuelta (si es que hay segunda), perfilarán mejor el nombre del próximo presidente de Colombia.
http://www.analitica.com/va/internacionales/opinion/4006651.asp
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