ESTO SE MUEVE (Escrito desde el dolor, el asombro y la esperanza)

Quienes insisten en quejarse de una supuesta “pasividad” del pueblo venezolano deberían por un momento apagar sus laptops o blackberrys y echar una ojeada a su alrededor. Verían algo como lo que a continuación relatamos, y entenderían porque escribimos desde donde lo hacemos…

ESCRIBIMOS DESDE EL DOLOR Y LA RABIA

En la Avenida Baralt la Policía Nacional arremetió violentamente el pasado jueves 10 contra una manifestación de habitantes del sector La Esperanza, que protestaban porque su barrio tenía medio año inundado por aguas negras. Problemas en las tanquillas, cloacas y drenajes transformaron el lugar en un lago de excrementos humanos. Meses de cartas, reuniones, proyectos y visitas sin resultado alguno forzaron a la comunidad a ejercer su derecho constitucional a la protesta pacífica. El gobierno no envió ingenieros, técnicos o cuadrillas a atender el problema. Pero si envió policías a la protesta. El saldo fue de muchos vejados, varios golpeados y seis presos.

Entre los detenidos, una señora de 68 años que se llama como el barrio: Esperanza. Esperanza Bejarano. Ella si tiene (de verdad) una fractura en su rodilla izquierda: Se lesionó cuando intentaba caminar sobre las piedras y los palos que los habitantes del sector colocan para intentar caminar sobre la porquería. Hace una semana le quitaron el yeso. El viernes 10 tenía que ir a terapia de rehabilitación. No pudo ir. Estaba presa.

Mientras todo esto estaba ocurriendo en Caracas, en el Sur del país los burócratas también empleaban la violencia contra el pueblo. Un sindicalero oficialista abrió fuego contra un grupo de trabajadores en el Portón 1 de Ferrominera del Orinoco. Esa noche de jueves Renny Rojas no regresó a su hogar. Su cuerpo estaba en la morgue. En el corazón de esa familia quedó una ausencia, una cicatriz dolorosa, “hecha en socialismo…”

ESCRIBIMOS DESDE EL ASOMBRO Y EL ASCO

Mientras todo esa violencia era desplegada contra distintos sectores del pueblo venezolano en diferentes lugares de la geografía nacional, fuera de ésta el señor Presidente de la República Hugo Chávez estaba siendo evaluado y preparado para ser sometido a una operación quirúrgica en un lujoso hospital de La Habana, Cuba, establecimiento donde sólo son atendidos los “altos dirigentes” de la burocracia dirigida por la senil dictadura de los hermanos Castro. La operación ocurrió el viernes 10 en la mañana, según comunicado oficial hecho público el viernes en la tarde. Deseamos al Presidente Chávez una feliz y pronta recuperación. Pero no salimos de nuestro asombro: Hace apenas una semana el Presidente Chávez afirmaba desde Macarao que “Venezuela tiene un sistema público de salud excelente”. Pero la salud del Contralor General, el Sr. Clodosbaldo Russián, y la del mismo Presidente de la República Bolivariana de Venezuela dependen de un gobierno extranjero.

Al final del comunicado oficial que informó al país (desde Cuba) sobre el estado de salud del Presidente, había una frase que presuntamente lo citaba: “Me consumiré gustosamente al servicio del Pueblo sufriente”. El sufriente pueblo venezolano, que efectivamente se consume en las colas de las emergencias de hospitales destartalados, sin insumos, con pocos médicos mal pagados, sin seguridad y hasta sin luz eléctrica, esta indignado por la gozante burocracia roja que hasta para operarse una uña encajada se interna en las mas lujosas clínicas de Caracas o se van, con todos los gastos cubiertos por el dinero del pobre, a operarse en el exterior. Ya no nos asombra la incompetencia, ni la corrupción, ni la insensibilidad de las actuales cúpulas podridas. Solo nos asombra, y nos da un profundo asco, su cinismo…

ESCRIBIMOS DESDE LA PROPUESTA Y LA ESPERANZA

Al día siguiente de la “hazaña” de la Policía Nacional contra ancianas, mujeres y hombres desarmados que protestaban por el abandono que los obliga a vivir entre la mierda en el sector La Esperanza, el viernes 10 muy tempranito, a las 4 de la mañana, los habitantes de Terrazas de La Vega tomaron la calle denunciando que las medidas tomadas por el Gobierno y el TSJ contra la empresa constructora de esa urbanización han terminado afectando el derecho de propiedad y la calidad de los servicios públicos a 1.800 familias...

...Luego a las 6 de la mañana vecinos de Caño Amarillo (en Catia, muy cerca del Palacio de Miraflores) tomaron también la calle para exigir mejoras sustanciales en los servicios públicos...

Poco después, a las 8 de la mañana, enardecidos manifestantes trancaban la Avenida Intercomunal de Antímano, exigiendo al gobierno ponerse al día en la venta de los tickets para el pasaje preferencial estudiantil.... ¡Así que si la represión contra la gente de La Esperanza fue para amedrentar a los caraqueños, no dió resultado!

Lo mismo pasó en el resto del país: Al día siguiente del crimen perpetrado en Guayana por un pistolero oficialista, en Táchira hubo una manifestación gigantesca denunciando las agresiones del gobierno central contra ese estado, en Margarita hubo un paro general contra la inseguridad y en Coro la comunidad se echó a las calles para evitar el cierre del Instituto Tecnológico de Coro, asfixiado económicamente por el Gobierno Central... ¡Así que si el asesinato perpetrado por el gatillo alegre rojo en Guayana fue para atemorizar a nuestros compatriotas del interior del país, tampoco allí el terrorismo de Estado logró su cometido!

COMPROMISO Y VISIÓN DE FUTURO

Que nadie se engañe. El hecho de que el gobierno crea que la política gira en torno a la enfermedades reales o inventadas de Chávez, o de que parte del liderazgo opositor suponga que la política consiste en los acuerdos o zancadillas de cara a sus primarias internas, no logra ocultar lo innegable: ¡Esto se mueve! Más que una aguda conflictividad social en búsqueda de actor político que la exprese, lo que esta en la calle es un nuevo actor político: el ciudadano movilizado. No es un asunto de reciclaje de promesas, como quisiera el gobierno. Tampoco es un tema de cayapas y desvencijadas maquinarias, como cierta oposición desearía. El asunto es de autenticidad, de esencia. Cada una de las comunidades en lucha arriba nombradas (La Esperanza, Terrazas de La Vega, Caño Amarillo, Antímano…) tienen líderes con un compromiso profundo con esa comunidad y propuestas concretas para salir adelante. Para la ciudad, para los estados, para toda Venezuela el pueblo no acepta menos: Quien quiera llamarse líder deberá mostrar en su testimonio de vida un profundo compromiso con este país, en particular con los más humildes, y una visión de futuro para este país, generadora de entusiasmo, promotora de esperanza y constructora de unidad.

Fuente: Radar de los barrios