elchacaldelainformacion@gmail.com
ALTOAPARTE: El paciente sigue su tratamiento. Entre el cansancio y el insomnio de esas terapias debe estar cubierto su día. Duerme hasta ocho horas y soporta con abundante yogurt las medicinas. Sigue cavilando los cambios de su equipo. Quiénes son más eficientes que otros, quiénes de los “viejos” lo hicieron mejor y quiénes no se han desviado de los propósitos iniciales. Lo que aquí escribimos sobre las luchas internas –demonios desatados- se agudizan con los días. Una revolución que no tiene sino un solo líder pasa un trance difícil en medio de estas angustias que demuestran la vulnerabilidad de la vida de todos los seres humanos. Momentos que hacen aflorar, así como la compasión y el respeto, las amarguras, celos, apetencias y envidias de quienes aspiran ascender en la escala política roja rojita. Adán Chávez ha sido uno de los más sorprendidos con el retorno inesperado del hermano quien según él le habría confiado -en el primer momento que se vieron en La Habana tras conocerse la existencia del cáncer- que “debes irte preparando para ser el candidato de la revolución si esta enfermedad me vence pues en manos de otros se perdería”. ¿Verdad o invento? Eso dicen los allegados de Adán quien sigue demasiado activo a la luz pública. Sin embargo me recuerdan que sus desafortunadas declaraciones lo pusieron muy mal con las Fuerzas Armadas, la oposición y los miembros del gobierno y lo mandaron al foso de las preferencias. Fidel, quien ha sido un sabio consejero para mantener activa no solo la maltrecha y desvencijada revolución cubana sino también la venezolana que mantiene a la suya, se aprovechó de la intimidad con el paciente recluido en La Habana para hacerle unas sugerencias importantes en torno a lo que le acontece al régimen venezolano. De entrada le aconsejó revisar su lista de colaboradores desde que comenzó a gobernar en 1999. Por ello no deberá sorprendernos que en un barajo ministerial veamos caras que otrora conocimos en los más de 170 ministros que han pasado por los cargos improvisando de la noche a la mañana o haciendo negocios con sus amigotes. Hablando de la familia no debe descartarse el ingreso de alguno de sus miembros al gabinete El primo Asdrúbal Chávez, quien tiene más de veinte años en Pdvsa, siempre ha sido señalado como reemplazo posible de Ramírez, pero nunca ha apetecido ese puesto. Mientras que Argenis, su hermano, está listo para reemplazar a Ali Rodríguez en el despacho de la electricidad.
MEDIO
VARIOPINTOS: Solo el vicepresidente Elías Jaua; los ministros Maduro, El Aissami, Ramírez, Rodríguez y Giordani; Adán y Asdrúbal Chávez; Cilia Flores y el Alto Mando Militar han conversado por algún tiempo con el mandatario en persona y en Miraflores. Los demás ministros al igual que el ex vicepresidente Rangel y los embajadores pudieron saludarlo personalmente el mismo 4 y el 5 en los actos protocolares. Los mandos militares hablaron por espacio de 15 minutos mientras preparaban el inicio del desfile desde el palacio. En La Roca nadie. Quienes digan otra cosa están mintiendo y tratando de ganar puntos con otros contendores para el próximo enroque ministerial. Estos cambios deben producirse entre hoy y el sábado a más tardar. Civiles y militares serán removidos de algunos cargos y otros pasarán a otras funciones de gobierno. Por teléfono interministerial y celulares si ha hablado mucho el jefe máximo. Fuera del gabinete, Jesse Chacón ha platicado varias veces. Del exterior ha conversado con Cristina Kirchner, Rafael Correa, Raúl Castro y con Fidel que lo llama mañana y tarde para saber como está y pendiente de que siga las instrucciones médicas al pie de la letra. Ayer llegó de Cuba un médico internista que se incorporó al equipo de los dos enfermeros que desde La Habana vinieron acompañando al caudillo operado. Por momentos, desde la llegada amaneciendo el lunes y tras sus intervenciones televisadas en cadena, la imaginación del venezolano perspicaz ha pasado de la incredulidad a la certeza cuando al verlo de militar en el balcón o recibiendo de civil a las delegaciones de inmediato pensaron que todo era un montaje. Con solo pensar que el presidente no estuvo en el más anhelado de sus momentos de los últimos tiempos, como era el desfile del Bicentenario, debían aceptar la verdad innegable de su enfermedad. A las delegaciones extranjeras que lo saludaron en el Palacio la Casa Militar y los funcionarios de protocolo de la cancillería les solicitaron que “cuidado con el saludo al comandante presidente. Si lo van a abrazar háganlo por arriba, por los hombros, pues en el estómago tiene una sonda que no se puede mover. Y así lo hicieron todos. Más tarde, al día siguiente, el 5, los presidentes José Mujica de Uruguay, Fernando Lugo de Paraguay y Evo Morales de Bolivia si lo saludaron en privado y pudieron platicar a solas con Chávez quien les dio una total relación de su caso y reiteró la enorme visión médica de Fidel. Me cuentan lo que ellos comentaron después con otras personas en los actos: Ninguno preguntó ¿de qué te operaron?, aceptaron solo lo que él les contó; Lugo, ex obispo y paciente de cáncer fue más amplio al compartir su experiencia personal con su colega enfermo pues le recomendó que con la oración y la fe todo se supera y que hay que tener una gran fortaleza anímica y preparación de la mente para superar los altibajos de los tratamientos de quimioterapia. Puso énfasis en los protectores gástricos y algunas frutas que ayudan al estómago. Lo que el colega Fausto Masó escribió el sábado en El Nacional en referencia a que “…en abril del 2002 solo sus hijas no le fallaron; ellas avisaron a Cuba que su padre no había renunciado…” se puede aplicar igualmente para esta situación. Como se ha visto, las dos, Rosa y María, han controlado la crisis del padre y han ejercido el verdadero poder tras el comandante para cerrar el círculo en su entorno y controlar tanto los tratamientos y sus tiempos -así se los pidió encarecidamente Fidel Castro- como el acceso al espacio donde descansa. Como el presidente Lugo fue tratado exitosamente en Brasil el gobierno de la señora Dilma Rousseff, a través de su embajador y de un contacto de Lula, le ofreció el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo para que sus médicos, los mismos que ayudaron al presidente paraguayo, lo trataran en suelo brasileño. La respuesta a ese ofrecimiento debe darla en unos días la cancillería venezolana. Suponemos que lo agradecerán pero no lo aceptarán debido a que si lo hacen dudarían de lo que se hizo en Cuba. El tratamiento seguirá en Caracas tal y como los médicos de Cuba y los tres venezolanos “invisibles” determinaron en su momento. Y habrán de supervisar callados.BAJO
OTRA RABIETA: La tercera mientras estaba en Cuba se debió al rechazo al acto administrativo ordenado por el comunista jefe de Conatel, dependiente de Jaua, contra Globovisión. “Esa es una bolsería como la que hicieron contra Ojeda”. Buena vara.Fuente: RunRun.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario