Hay tres puntos fundamentales en un expediente cuyo diseño adelantado en los niveles de la inteligencia extranjera vaticina la derrota de Chávez en los comicios de 2012. En próximas ediciones analizaré cada escenario, hoy sólo daré a conocer los puntos cardinales de una estrategia que se me ocurre bautizar como Expediente Chávez. Los aspectos son los siguientes: 1) El caso Makled (opción Noriega): Interés en relacionar a Chávez con el narcotráfico. 2) El Informe del IISS (opción Gadafi) como argumento para sustentar su eventual relación con grupos calificados de terroristas. En ese informe se desglosa el contenido de la computadora de Raúl Reyes donde se compromete a Venezuela. 3) Los componentes internos (opción 27F). Acá se destacan: la crisis eléctrica, la inflación y la inseguridad; todos cuidadosa y pacientemente trabajados. En la crisis eléctrica sobresale: primero el desconocimiento de la materia por parte de quienes dirigen el sector; segundo la inamovilidad laboral y tercero la contradictoria disposición del ministro Rafael Ramírez de congelar el pago de los compromisos con la principal transnacional que maneja Tocoma (el proyecto hidroeléctrico bandera del Gobierno, previsto para ser inaugurado en víspera de las elecciones de 2012). El siguiente componente es económico y se refiere a multiplicar el descontento aprovechando que el aumento salarial choca contra la muralla inflacionaria ignorada ex profeso por los ministros de la Economía, quienes están ocupados en una pugna por mantener el privilegio de manejar las transacciones cambiarias, antes que combatir al flagelo que consume los salarios. Un último ingrediente es la inseguridad, donde la violencia delictual, (veladamente justificada por el Gobierno) como arma de los más necesitados para encarar la pobreza, se combina con la premeditada injerencia extranjera promocionando el delito utilizando paramilitares con plataforma en la crisis carcelaria, ambas posiciones se fusionan para complicar el panorama de la seguridad en Venezuela. Mientras tanto, Chávez duerme con el enemigo y no ha medido la potencialidad de quienes, a la sombra, preparan su salida. En tanto que sus encuestadores (revalidando indirectamente los propósitos de la estrategia extranjera) le mienten acerca de la realidad nacional ocultándole que el Gobierno revolucionario ha dejado de ser una calle con huecos para convertirse en un hueco con calles.
Fuente: Las Verdades de Miguel
Fuente: Las Verdades de Miguel
No hay comentarios:
Publicar un comentario