Que Ricky Martin haya salido del clóset me tiene sin cuidado, ¿a quién le importa eso más que a él? Pero la relación que tiene el PPT con el Gobierno se parece a la de Ricky. Él estaba en nuestro bando, pero sufriendo porque quería estar en el otro.
Ricky temía saltar la talanquera, pero, como diría Uribe, tenía que comportarse como un varón siendo sincero consigo mismo.
Esteban de Jesús tiene razón cuando increpa a los encerrados en el clóset de la revolución y les pide que se definan: o me idolatran de rodillas o se van de mi lado. A nuestro querido líder no le basta con que los aduladores se arrastren.
No. Su teoría es: arrástrense pero como yo les digo.
Cada vez que escucho al secretariado del partido Patria Para Todos diciendo que no importa cómo los traten porque ellos siguen creyendo en “el proceso”, me pregunto: ¿cuál proceso?, ¿el del autoritarismo?, ¿el de los presos políticos?, ¿el de la sumisión a Cuba?, ¿el de los niños adoctrinados, como hacían Hitler y Mussolini?, ¿el de los insultos, las descalificaciones y las groserías?, ¿el del atraso generalizado en el que nos encontramos? ¿En eso es en lo que creen? Como si lo anterior no bastara, todos los días, literalmente, les dan patadas por el culito.
Cómo es posible que se tenga tan poca dignidad para decir cosas como: Ustedes saben cómo es Esteban de Jesús… él tiene su estilo… otras veces ha pasado y después vuelve a querernos.
Claro está que a raíz de la salida del clóset de Henri Falcón, la cosa ha cambiado radicalmente. ¡Falcón es un varón! En lo personal, y esto realmente es muy personal, me cuesta entender cómo es posible que los que ahora despiertan no hayan visto nada antes. Repito, es una necedad mía sin importancia, dado el acto de valentía de quienes salen del bando de los malucos sabiendo lo peligroso que es.
La comparación de Ricky Martin con el PPT es pertinente, porque la talanquera nunca se brinca al revés. Nadie ha visto a un gay, hasta donde yo sé, que se haya pasado al bando de los heterosexuales. Siempre es lo contrario.
Los gobiernos autoritarios o las dictaduras abiertas como las de Fidel, Hitler, Stalin o Mussolini, en su momento, inexplicablemente, siempre consiguieron apoyo de personajes o grupos que están, pero no están. Esos son los que, cuando se acaban esos regímenes o es inminente su fin, salen hechos los pendejos a decir que ellos nunca estuvieron de acuerdo con lo que pasaba o, peor, que no sabían.
Mi admirado Pablo Milanés, después de que durante 50 años ha apoyado las cosas horribles que ocurren en Cuba, “descubre” ahora que la dictadura de los hermanos Castro es mala. Bienvenida su salida del clóset revolucionario, pero, ¿no será tarde para alguien que toda su vida ha puesto su imagen y su inmenso talento en apoyar la tortura que ha soportado el pueblo cubano? Silvio Rodríguez, también tímidamente, medio se asomó por la puerta del clóset revolucionario, diciendo algo como: Yo sé que esto es horrible… pero yo apoyo la revolución, a pesar de…
¡Silvio!, termine de salir de ese macabro clóset. No siga comiendo pollo. ¡Sea varón! Diga la verdad.
Amigos del PPT, les juro que esto no es nada personal. No esperen que la polilla roja termine de comerse el clóset en el que están mal guardados.
Tengan la valentía de Ricky Martin, que, como un varón, le gritó al mundo: Yo sí soy, ¿y qué? Amigos del PPT: ¿ustedes son o qué? En todo caso, mientras deciden qué hacer: ¡Coman huevos!
BLOGS.NOTICIERODIGITAL.COM/CLAUDIO/
Ricky temía saltar la talanquera, pero, como diría Uribe, tenía que comportarse como un varón siendo sincero consigo mismo.
Esteban de Jesús tiene razón cuando increpa a los encerrados en el clóset de la revolución y les pide que se definan: o me idolatran de rodillas o se van de mi lado. A nuestro querido líder no le basta con que los aduladores se arrastren.
No. Su teoría es: arrástrense pero como yo les digo.
Cada vez que escucho al secretariado del partido Patria Para Todos diciendo que no importa cómo los traten porque ellos siguen creyendo en “el proceso”, me pregunto: ¿cuál proceso?, ¿el del autoritarismo?, ¿el de los presos políticos?, ¿el de la sumisión a Cuba?, ¿el de los niños adoctrinados, como hacían Hitler y Mussolini?, ¿el de los insultos, las descalificaciones y las groserías?, ¿el del atraso generalizado en el que nos encontramos? ¿En eso es en lo que creen? Como si lo anterior no bastara, todos los días, literalmente, les dan patadas por el culito.
Cómo es posible que se tenga tan poca dignidad para decir cosas como: Ustedes saben cómo es Esteban de Jesús… él tiene su estilo… otras veces ha pasado y después vuelve a querernos.
Claro está que a raíz de la salida del clóset de Henri Falcón, la cosa ha cambiado radicalmente. ¡Falcón es un varón! En lo personal, y esto realmente es muy personal, me cuesta entender cómo es posible que los que ahora despiertan no hayan visto nada antes. Repito, es una necedad mía sin importancia, dado el acto de valentía de quienes salen del bando de los malucos sabiendo lo peligroso que es.
La comparación de Ricky Martin con el PPT es pertinente, porque la talanquera nunca se brinca al revés. Nadie ha visto a un gay, hasta donde yo sé, que se haya pasado al bando de los heterosexuales. Siempre es lo contrario.
Los gobiernos autoritarios o las dictaduras abiertas como las de Fidel, Hitler, Stalin o Mussolini, en su momento, inexplicablemente, siempre consiguieron apoyo de personajes o grupos que están, pero no están. Esos son los que, cuando se acaban esos regímenes o es inminente su fin, salen hechos los pendejos a decir que ellos nunca estuvieron de acuerdo con lo que pasaba o, peor, que no sabían.
Mi admirado Pablo Milanés, después de que durante 50 años ha apoyado las cosas horribles que ocurren en Cuba, “descubre” ahora que la dictadura de los hermanos Castro es mala. Bienvenida su salida del clóset revolucionario, pero, ¿no será tarde para alguien que toda su vida ha puesto su imagen y su inmenso talento en apoyar la tortura que ha soportado el pueblo cubano? Silvio Rodríguez, también tímidamente, medio se asomó por la puerta del clóset revolucionario, diciendo algo como: Yo sé que esto es horrible… pero yo apoyo la revolución, a pesar de…
¡Silvio!, termine de salir de ese macabro clóset. No siga comiendo pollo. ¡Sea varón! Diga la verdad.
Amigos del PPT, les juro que esto no es nada personal. No esperen que la polilla roja termine de comerse el clóset en el que están mal guardados.
Tengan la valentía de Ricky Martin, que, como un varón, le gritó al mundo: Yo sí soy, ¿y qué? Amigos del PPT: ¿ustedes son o qué? En todo caso, mientras deciden qué hacer: ¡Coman huevos!
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